Tieso y caluroso, en la penumbra de mí lecho
almidonado esta mí palo, aún mas atento
a los tacs, tacs, tacs, tacos de tus tacos
me mantengo sumergido y perturbado.
Oh!! Inconsciente imaginario, solo escucho
dos agujas que atraviesan los cerámicos
Una negra, dos corcheas y las fusas
como musas intervienen este canto.
Solo ruego al piso de mi techo
los durmientes de mi dpto
no se encuentren añejados.
Y que vos chavala no te vengas
a pique bailoteando y me encuentres
en mi cama, con el culo levantado.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario